Director, argumentista, guionista y editor. Debido a las dificultades políticas de su padre con el general Bernardo Reyes, así como económicas, su familia cambia de residencia constantemente. En la Ciudad de México, su interés por el cine lo lleva a visitar los Estudios Ediciones Camus propiedad del distribuidor Germán Camus ubicados en la calle de Revillagigedo, para conocer el ambiente donde se ruedan las películas. En los estudios al cargar una mesa, lo confunden con un trabajador y se queda a laborar sin remuneración.
Inicia estudios de Odontología, carrera que abandona para buscar fortuna en Hollywood. Alejandro Galindo trabaja ahí como laboratorista, área en la que se inicia como secador de películas, posteriormente es editor de trailers, traductor de intertítulos y guiones, escritor y asistente del director y productor Cecil B. de Mille en los estudios Metro Goldwyn Mayer. Al mismo tiempo, estudia dibujo en el Otis Art Institute, aprendizaje literario en el Hollywood Institute of Script Writing and Photoplay, y principios de teatro y actuación en Pasadanena. Con la llegada del cine sonoro es contratado en los Columbia Pictures para adaptar al español las películas realizadas en éstos. A raíz de la crisis económica de 1929, regresa a México en 1930.
En la Ciudad de México se desempeña como guionista para la radio, argumentista y eventual actor de cine. Su primer trabajo formal en la pantalla grande mexicana es el guion de La isla maldita/Boris Maicon 1934, al que siguen los de El baúl macabro/Miguel Zacarías 1936 y Ave sin rumbo/Roberto O’Quigley 1937.
Tras dirigir el corto documental Teotihuacán, tierra de emperadores/1935, Raúl de Anda le propone producirle una cinta, Galindo acepta y es así que ambos escriben el argumento y guion que marca su debut: Almas rebeldes/1937. Un drama entre federales y rebeldes en tiempos de la revolución, en el que se entreteje una historia amorosa; cinta que Alejandro Galindo edita y en la que el productor además actúa, en compañía de Nancy Torres, Emilio Fernández y Eduardo Arozamena, entre otros.
Esta es la primera película de la abundante filmografía de Alejandro Galindo, que consta de 76 películas de diversos géneros, como el de la familia; filmes cuyos temas son abordados con una visión muy distinta al cine conservador y convencional del cine mexicano de aquellos años, una radiografía profunda de la sociedad.
Las películas con temas gangsteriles, en ambientes urbanos, con cierta inspiración en las cintas del género policiaco hollywoodense, destacan en la obra de Alejandro Galindo. La reconstrucción de los bajos fondos capitalinos y el uso del caló propio del hampa capitalina, se muestran en Mientras México Duerme/1938, primer ejemplo del melodrama mexicano de gangsters. Para esta película, el realizador se inspira en un hecho real, sobre el asesinato de un boticario de la farmacia Bucareli. Federico “La Cierva” (Arturo de Córdova), jefe de un grupo de traficantes de drogas, cuyo cuartel está ubicado en un garaje, decide retirarse de la vida delictiva para casarse con Margarita (Gloria Morel) secretaria de un abogado. La buena factura del filme comienza a darle prestigio a Alejandro Galindo en el medio cinematográfico.
La otra película llevada a cabo en los bajos fondos de la ciudad es Cuatro contra el mundo/1949. El asalto a dos empleados de la Cervecería Modelo, perpetrado por los asaltantes “El Lagarto” (Manuel Dondé), Máximo (Tito Junco), el jefe de la banda Paco (Víctor Parra), Toni (José Pulido), resulta exitoso pues se llevan un jugoso botín. “El Lagarto” resulta herido y se van a refugiar a un cuartucho de vecindad donde vive Lucrecia (Leticia Palma), amante de Máximo. Una historia de traiciones con final fatal. Otros melodramas de ambiente gangsteril menos logrados son: Virgen de medianoche/El imperio del hampa/1941, trama en que un hermano se sacrifica por su hermano menor para que estudie y tenga un mejor futuro.
Lleva a la pantalla el muy popular programa de radio El monje loco/1940 con relatos de horror y misterio, protagonizado por Salvador Carrasco, el mismo actor de la emisión radial, acompañado de Alejandro Cobo y Rafael Baledón, entre otros. Alejandro Galindo divide la película en seis episodios que se exhiben en dos días, como se hacía en la época del cine mudo que presenció cuando era niño: La gárgola humana, La reencarnación de Elma Vordoni, El horrendo caso del Cristo justiciero, La herencia negra, El horrible caso de los dientes de marfil y El extraño caso de las manos cortadas.
Una de las cualidades de Alejandro Galindo es su gran capacidad de observación referente a los grupos urbanos. Con Campeón sin corona/1945, ¡Esquina bajan!/1948, Hay lugar para… dos/1948 y Confidencias de un ruletero/1949, realiza una serie de películas en las que refleja, con toda fidelidad, la vida y lenguaje propio de los habitantes de los barrios populares de la Ciudad de México. Campeón sin corona/1945, inspirada en la vida del famoso boxeador Rodolfo “El Chango” Casanova está considerada como una de sus mejores películas por la forma en que recrea el ámbito en el que se desenvuelve el boxeador Roberto “Kid Terranova”, cuyo oficio real es el de un paletero. El Tío Rosas (Carlos López Moctezuma) descubre en Roberto las cualidades de un gran noqueador. Con el Tío como manager y “El Chupa” como su ayudante o segundo (Fernando Soto “Mantequilla”), el “Kid Terranova” conoce el triunfo y el dinero en abundancia. Una joven de sociedad, Susana (Nelly Montiel), lo seduce para finalmente serle infiel y abandonarlo. Además, lo derrota el vicio y cae en lo más bajo. Contando con el apoyo de su madre doña Graciela (María Gentil Arcos) y su novia Lupita (Amanda de Llano) vuelve a su vida de nevero. La cinta recibe en 1947 los Arieles por: Mejor Película y Argumento Original (Alejandro Galindo), Mejor Actor (David Silva) y Coactuación Masculina (Fernando Soto “Mantequilla”).
El productor Raúl de Anda no quería que Galindo filmara Campeón sin corona, a cambio le solicitó que después realizara El muchacho alegre/1947 cinta de aventuras rancheras sobre el ranchero Luis (Luis Aguilar) que regresa a su pueblo y es acusado por un crimen que no cometió. La película fue premiada con el Ariel en 1949, por: Mejor Coactuación Masculina (Víctor Parra).
¡Esquina bajan!/1948, comedia melodramática sobre el atrabancado y rijoso chofer sindicalizado de un camión de pasajeros, Gregorio del Prado (David Silva) y el cobrador del camión Constantino Reyes Almanza “Regalito” (Fernando Soto “Mantequilla”) que laboran en la línea cooperativista Zócalo, Xochicalco y Anexas. Alejandro Galindo recrea el ambiente sindicalista, con sus conflictos y el lenguaje del gremio de manera puntual y divertida. Se le otorgan en 1949 los Arieles por: Mejor Guion Adaptado (Alejandro Galindo) y por Mejor Edición (Fernando Martínez).
En Una familia de tantas/1948, aborda el tema de la vida cotidiana de la familia Cataño, donde el patriarca absoluto, don Rodrigo Cataño (Fernando Soler) crea un ambiente cerrado, asfixiante y autoritario en el que su palabra es la ley. Tradición simbólicamente representada en un retrato del dictador Porfirio Díaz colgado en la sala, donde la casa adquiere todas las connotaciones de una prisión: horarios para ver al novio, para el cuarto de baño, las horas de la comida. Una visión crítica sobre la familia, que da como resultado una de las mejores películas de este género. El filme obtiene en 1950 los Arieles por: Mejor Película, Dirección, Coactuación Femenina (Martha Roth), Papel de Cuadro Femenino (Enriqueta Reza), Mejor Adaptación (Alejandro Galindo) y Mejor Escenografía para Gunther Gerzo.
En el melodrama Doña Perfecta/1950, basada en una novela homónima del español Benito Pérez Galdós, Alejandro Galindo adapta al medio mexicano la historia de una matriarca, doña Perfecta (Dolores de Río), poderosa dama de mediana edad, adinerada, elegante y refinada, que habita rodeada de figuras e imágenes religiosas, en el Bajío de la República Mexicana. Una próspera zona agrícola donde controla de manera férrea los hilos del poder y los negocios en la región. El control social lo ejerce por medio de relaciones y alianzas mediante la concertación de matrimonios entre su exclusivo círculo de amistades.
A este núcleo conservador, arriba Pepe Rey (Carlos Navarro), sobrino de doña Perfecta, con estudios de ingeniería en Europa, a quien considera un excelente candidato para contraer matrimonio con su única hija, Rosario (Esther Fernández). Corre el año de 1876 en el contexto de las revueltas que llevan por primera vez al general Porfirio Díaz a la presidencia, por lo que hay inquietud entre los pobladores del Bajío. La propuesta para diseñar un nuevo proyecto de riego, así como las ideas y actitudes liberales de Pepe, provocan un enfrentamiento con su tía que cree que esto afectará su patrimonio. Ella ordena el asesinato de su sobrino, sin importarle la desolación de su hija. La cinta es galardonada en 1952, con los Arieles por: Mejor Actuación Femenina (Dolores de Río), Mejor Coactuación Masculina (Carlos Navarro) y Mejor Guion Adaptado para el realizador.
Alejandro Galindo aborda un melodrama sobre la corrupción, Los Fernández de Peralvillo/1953. Película basada en la obra de teatro de Juan H. Durán y Casahonda, sobre el joven arribista Mario Fernández (Víctor Parra), vendedor de casa en casa, que tiene que sostener a su numerosa familia. Desesperado por la estrechez económica, se asocia con un antiguo amigo de la primaria, Roberto Márquez (David Silva), en un negocio ilícito. Se hace millonario y al sentirse poderoso desdeña a su familia y traiciona a su amigo. Cinta que le merece en 1955 el Ariel por Mejor Película, Mejor Dirección, Mejor Actuación Masculina (Víctor Parra), Mejor Papel de Cuadro Femenino (Leonor Llausás), Argumento Original (Juan Durán y Casahonda) y Guion Adaptado para su hermano, Marco Aurelio Galindo.
México nunca duerme/1958. La abuela (Prudencia Grifell) se encuentra muy angustiada pues su nietecita, Irene Valdecillos (Sylvia Suárez), una joven empleada que trabaja en la Zapatería Progreso, no llega a casa. Es sábado por la noche e Irene con su novio Javier Cervantes (Lincoln Salazar) se aventuran para visitar los cabarets en la Ciudad de México. La abuela decide buscarlos de cabaret en cabaret y se topa con Buenaventura (Antonio Badú), tratante de blancas y dueño del cabaret “Hollywood” que busca a la cabaretera Perla (Pin Crespo) que ha escapado y sabe mucho del negocio. Juntos inician la búsqueda, a través de centros nocturnos como el “Saratoga”, “Pigalle”, “Tabú”, “Las Catacumbas”, “Corinto”, “Las Rosas”, el “Babalú” en los que trabajan los populares músicos: Dámaso Pérez Prado, Pablo Beltrán Ruiz y Antonio Escobar, entre otros. Aventura al lado de un rufián, que aún con ciertos quiebres dramáticos, llegará a buen fin.
Hay lugar para… dos. Gregorio del Prado (David Silva), se hace amante de la coqueta Kitty (Katy Jurado), mientras su esposa Cholita (Olga Jiménez) se va a vivir con Regalito (Fernando Soto “Mantequilla”) y La Bicha (Delia Magaña), ya que va a tener un hijo de Gregorio. Kitty reta y provoca a Gregorio para que le gane a un tranvía, pero chocan; ella termina con el rostro desfigurado, dos niños pasajeros quedan huérfanos y un niño corre el riesgo de perder sus manos. Gregorio se declara culpable, pero el sindicato paga para que lo dejen en libertad. Arrepentido vuelve con Cholita.
En Confidencias de un ruletero/1949 Galindo vuelve a desplegar su conocimiento del medio urbano y el caló, la forma popular de hablar en los barrios bajos al narrar los líos en los que se ve involucrado el ruletero Lauro Escamilla y Cejudo (Adalberto Martínez “Resortes”) cuando encuentra un cadáver en su taxi. Los diálogos del cómico con los pasajeros son divertidos.
A fines de los años cincuenta, Alejandro Galindo pierde la visión crítica que tuvo diez años antes y en estos filmes se dedica a regañar a los jóvenes, con un tono moralista sobre el cuidado de su sexualidad y los peligros que implican no obedecer a los padres, y a la vez también llama la atención de los progenitores descuidados e irresponsables en los filmes: Y mañana serán mujeres/1954, La edad de la tentación/1958, Ellas también son rebeldes/1959 Mañana serán hombres/1960.
El tema de los migrantes es abordado por el cineasta en dos ocasiones; la primera en la cinta Espaldas Mojadas/1953 protagonizada por dos de sus actores favoritos, David Silva como Rafael Améndola Campusano y Víctor Parra como el malvado gringo Mister Sterling. El título de la película se refiere a las personas que entran a los Estados Unidos ilegalmente por el Río Bravo, y narra las penalidades y verdaderas dificultades para hallar un trabajo en aquel país. El tema incomodó al Departamento de Estado en Washington. En un documento publicado en el libro biográfico del director, escrito por Francisco Peredo Castro, de acuerdo a ellos, Alejandro Galindo distorsionó la realidad con respecto a los indocumentados en su país. Razón que retrasó el estreno de la película dos años.
En los premios Ariel 1956 gana por: Actor de cuadro: Eulalio González “Piporro”; Actriz de cuadro: Carolina Barret; Argumento original: Alejandro Galindo. Ariel Especial a Espaldas Mojadas “por ser la película de mayor interés nacional”.
Su segundo filme sobre el tema se titula Mojados/Wetbacks/1977, sobre el “espalda mojada” Juan (Jorge Rivero), que enfrenta los asesinatos de sus compañeros, la explotación de una mafia comerciante de braceros y la corrupción de los políticos de la región texana. Se filma en el Río Grande Valley, Texas, en los Estados Unidos.
El cineasta continúa su trayectoria abordando diversas temáticas de manera más rutinaria como: la delincuencia en Los dineros del diablo/1952; versiones cinematográficas de radionovelas y telenovelas: Corona de lágrimas/1967 y Remolino de pasiones/1969; biografías: La vida de Agustín Lara/1959; el ambiente popular en Tacos al carbón/1971 y Las del talón/1977 en el género del cabaret.
En su filmografía destacan películas galardonadas como: Esposa te doy/1956, historia que escribe, en la que aborda el rechazo y la intolerancia a las mujeres divorciadas, a quienes la clase alta considera unas mujerzuelas. Los recién casados Alberto del Valle (David Silva) y “Chofi” (Martha Elena Cervantes) pelean por recibir en su casa a su amiga, recién divorciada, Amelia (Maricruz Olivier). El rechazo a Amelia es alentado por la mamá de “Chofi”, doña Augusta de la Llave (Maruja Grifell) que le advierte que las mujeres separadas son un peligro para las mujeres. En un alarde de doble moral, esta mujer soporta estoicamente las infidelidades de su marido, Marcelino de la Llave (José Baviera). Alejandro Galindo recibe en 1958 el Ariel por Mejor Argumento Original.
Otro filme ganador es La mente y el crimen/1961 sobre el que Rafael Aviña, crítico de cine comenta: “es una curiosa y adelantada cinta sobre la labor de la ciencia y la policía, inscrita en los sórdidos recovecos de la nota roja y la sicología del asesino; una extraña y fascinante combinación de documental, reportaje y ficción que partía de un hecho verídico: el descubrimiento de un torso humano arrojado en un canal cercano a la zona de la Merced. En la cinta, Alejandro Galindo rastrea en la mentalidad psicópata y en la realidad de la investigación policiaca, que poco o nada tenían que ver con el retrato ficticio de la cinematografía mexicana, aproximando su relato al cine negro policiaco más brutal y realista”.
La mente y el crimen realización en blanco y negro, fotografiada por Sergio Véjar, casi sin diálogos, es una historia en que la criminalística moderna y el trabajo de los agentes especializados determinan que el 11 de septiembre de 1961 se localizó el torso de una jovencita, enfermera ella, Magdalena Alfaro, a la que un sujeto, un tal Aurelio Ruiz Redondo, tablajero, raptó con engaños y se la llevó en su camioneta para repartir carne. Más tarde, la golpeó brutalmente, estranguló y violó después de muerta, descuartizó y arrojó el torso –con una mordida suya–, a un canal fétido en Puente de Carretones. En la reconstrucción final de los hechos, el asesino acaba por delatarse, ante una temeraria trampa tendida por la policía y un médico, jefe de la infortunada jovencita victimada.
Alejandro Galindo plantea la violencia como el sentimiento dominante en el hombre, trabajo que compila entrevistas a especialistas en criminología y psiquiatría, ganador en la IX Reseña del Film Científico, celebrada en la Universidad de Roma en 1962, del segundo premio Robot d’Oro o Diploma D’onore por parte del Instituto Internacional de la Cinematografía Educativa y Científica.
Dirige Cristo 70/1969, argumento y adaptación de Enrique Rosado y Alejandro Galindo. Raúl hijo de una familia acomodada, lidera un grupo de jóvenes conformados por Julio, Yolo y Chololo que se dedican a la vagancia, inspirados por la noticia de un asalto a un banco, deciden hacer lo propio y robar una avioneta con la raya de una compañía minera; logran su cometido y se esconden en el pueblo de San Andrés donde se hacen pasar por ingenieros, Raúl es elegido para interpretar a Jesús en la representación de Semana Santa del lugar, sus amigos Yoyo y Chololo son convencidos para encarnar a Dimas y Gestas, Julio se entera que son buscados por el robo y los traiciona, al final Raúl se redime al morir en la cruz. Intérpretes Carlos Piñar, Karla, José Roberto Hill, Claudia Martel, Gabriel Retes, Alejandro Fougier, Enrique Novi, Guillermo Orea y Rocío Palacios. Producción de Foga Films y Constelación y Francisco Oliveros del Valle, se filma el 10 de noviembre de 1969 en los Estudios Churubusco y locaciones en la Zona Rosa del Distrito Federal, y Tequisquiapan, Querétaro. Se estrena el 26 de marzo de 1970 en los cines Palacio Chino, Carrusel, Ópera, Reforma, Colonial, Marina, Bahía, Maya, Soledad, Corregidora, Fausto Vega, Santos Degollado, Francisco Villa y Emiliano Zapata, se mantiene tres semanas en cartelera.
La película que cierra la extensa filmografia de este notable director se titula Lázaro Cárdenas/1985, producida por Medea de Novara, filmada entre octubre y noviembre de 1985 con un costo de 250 millones de pesos. La cinta es un homenaje al expresidente Lázaro Cárdenas a quien el realizador tenía una gran admiración; trabajo que combina escenas documentales de la expropiación petrolera con la actuación de Adalberto Martínez “Resortes” que representa la voz del pueblo. El estreno coincidió con campañas en contra del expresidente Cárdenas, en el sexenio de Miguel de la Madrid. Por ejemplo, fue mutilado el periodo cardenista en la telenovela “Senda de Gloria” producida por Televisa y el IMSS.
Al finalizar el sexenio de Miguel de la Madrid en 1988, se iniciaron las campañas políticas por la Presidencia de la República, contendiendo entre otros, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano por el PARM (Partido Auténtico de la Revolución Mexicana) y Carlos Salinas de Gortari por el PRI, quien se dice, gana la silla presidencial de manera fraudulenta. De acuerdo al investigador y biógrafo del director, Francisco Peredo, el gobierno prohíbe la exhibición de la película de Alejandro Galindo, pues la considera un acto propagandístico a favor de la candidatura del hijo de Lázaro Cárdenas. Únicamente se realiza en una función privada el 25 de enero de 1988 en los Estudios Churubusco; el filme se adquiere durante algunos años en DVD.
Las películas de Alejandro Galindo acumulan más de una veintena de reconocimientos nacionales y extranjeros; él, en particular, es merecedor de numerosas distinciones entre ellas: en 1987 la Medalla Filmoteca; en 1988 la Medalla al Merito Cinematográfico por sus 50 años como director, otorgada por la Sociedad Mexicana de Directores, Realizadores de Cine, Radio, Televisión y Videogramas, S.A. de I.P.; ocho premios Ariel por su labor como director, argumentista y adaptador; el Ariel de Oro, la Medalla Salvador Toscano por su valiosa trayectoria, ambos en 1991; y, poco antes de su muerte, la Cineteca Nacional lo homenajea dándole su nombre a la sala No. 5 del recinto.
AG.- “Fue fiebre; todo el mundo quería entrar al cine, razón por la cual hubo de crearse el Sindicato de Directores. Había que controlar la calidad: Uno no puede ser miembro de un sindicato si no tiene la categoría, la calidad, el reconocimiento de ser un trabajador capaz, para pertenecer al Sindicato al cual quiere ingresar. (…) Al Sindicato de Directores es al que le cargan la culpa de que, por no dejar entrar a nadie, el cine esté tan atrasado. Todo eso que se ha venido diciendo es mentira. Siendo el cine mexicano el más pobre del mundo y siendo el resto de las industrias extranjeras muy cuidadosas, muy celosas del desarrollo de sus respectivas industrias, ningún cine ha hecho debutar más directores que el mexicano.”
(Cuadernos de la Cineteca Nacional, “Alejandro Galindo”, coord. Eugenia Meyer, No. 1, pp. 105-106)
Hermano del adaptador, argumentista, guionista, crítico de cine y también director, Marco Aurelio Galindo y esposo de la actriz española Pin Crespo. La magia del cine lo atrapa en su adolescencia, etapa en que decide que se dedicará a éste. Asiste continuamente a las salas cinematográficas con algunos compañeros, gusto que se vuelve una obsesión. Durante su estancia en Hollywood, a finales de los veinte, aunque cuenta con la recomendación de su hermano, no se atreve a pedir empleo en el cine y termina en un laboratorio fotográfico donde se inicia trapeando.
De regreso en México, su primera película como director, Almas rebeldes/1937, se produce gracias al producto de la venta de 38 vacas que hace Raúl de Anda para financiarla; por cierto, a mitad del filme, el dueño del caballo que utilizan en el rodaje se enoja y exige la devolución del equino, por lo que, para justificar su desaparición, el personaje que interpreta el “Indio” Fernández lo mata de un balazo.
Como dirigente sindical, en los cuarenta tiene una controvertida gestión al frente del Sindicato de Directores, ya que para algunos realizadores su labor es de apoyo irrestricto a sus miembros, pero para otros es el responsable de la cerrazón del sindicato para admitir a nuevos miembros.
En forma alterna a su carrera como realizador, Alejandro Galindo también destaca como uno de los contados cineastas que escriben libros acerca del cine mexicano, siendo de su autoría: “Carta abierta de un director de películas al futuro presidente de México”/1963, “Una radiografía histórica del cine mexicano”/1968, “El cine, genocidio espiritual de 1900 al crash del 29”/1971, “¿Qué es el cine?”/1975 y “Verdad y mentira del cine mexicano”/1981.
Cine Mexicano, Su Historia. Alejandro Galindo (Parte 1)
Cine Mexicano, Su Historia. Alejandro Galindo (Parte 2)
Cine Mexicano, Su Historia. Alejandro Galindo (Parte 3)
Un vistazo a la obra y vida del cineasta Alejandro Galindo
“¡Esquina bajan!”. Película completa
https://www.facebook.com/watch/?v=159296765750273
“El muchacho alegre”. Película completa
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