VELASCO FRAGOSO, MARÍA ELENA “LA INDIA MARÍA”

Actriz, bailarina, guionista, directora y compositora. Estudia comercio en la Ciudad de México. Se prepara para la actuación con Carlos Ancira y Dimitrio Sarrás. María Elena Velasco “La india María” continúa sus estudios de dirección con Ludwig Margules y de guionismo con Xavier Robles y Raúl Figueroa. Se inicia como bailarina de teatro de revista, ambiente en donde conoce a su esposo, el coreógrafo, actor y director artístico, Vladimir Lipkies, mejor conocido como Julián de Meriche.

En los años sesenta, siendo él director del recién inaugurado Teatro Blanquita, María Elena Velasco incursiona como “patiño” de cómicos como “Resortes”, “Mantequilla”, “Medel”, “El Ojón Jasso”, “Palillo” y “Clavillazo”. Participa en películas musicales en las que baila al lado de Germán Valdés “Tin Tan” y de Javier Solís. Tiene pequeñas participaciones en las cintas Ruletero a toda marcha/Rafael Baledón 1962, El rey del tomate/Miguel M. Delgado 1963 y Los derechos de los hijos/Miguel Morayta 1963.

El personaje de “La India María” surge después de muchos años de trabajar en el Teatro Blanquita, cuando un empresario le pide que supla a un cómico en una gira, en Pachuca. Es entonces cuando interpreta a una provinciana recién llegada a la ciudad para emplearse como trabajadora doméstica. Al público le gusta este peculiar personaje, por lo que decide transformarlo en una india mazahua, de las que curiosamente alrededor de los años setenta llegan al Distrito Federal a trabajar como vendedoras ambulantes de naranjas. Con este personaje pasa del Teatro de Revista a la televisión y posteriormente a la pantalla grande.

Con el personaje de “La India María” debuta en el programa de televisión “Domingos Espectaculares” del Canal 8 que conduce Neftalí López Páez, emisión que se transforma posteriormente en “Siempre en Domingo”, revista de entretenimiento a cargo de Raúl Velasco, programa a través del que se da a conocer en todo el país, y donde se convierte en una famosa y querida figura pública.

Gracias a El bastardo/Arturo Martínez, su personaje de “La India María” es calurosamente aceptado por el gran público. Protagoniza las cintas: Tonta tonta pero no tanto/1971, Pobre pero… ¡honrada!/1972, El miedo no anda en burro/1973, Duro pero seguro/1974, dirigidas por Fernando Cortés; Sor Tequila/Rogelio A. González 1977 y El que no corre, vuela…/1980 bajo la realización de Gilberto Martínez Solares, producidas por Fernando de Fuentes, Jr. Es responsable del argumento y adaptación de Okey Mister Pancho/Gilberto Martínez Solares 1981. Su filmografía como actriz incluye 28 películas, de las cuales es directora de cuatro, mismas que protagoniza, financiadas con capital privado.

María Elena Velasco debuta en la dirección con la comedia El coyote emplumado/1983, sobre un guion que escribe con su hija Ivette Lipkies (como Goretti Lipkies V.) y Alfredo B. Crevenna, una producción de Antonio Matouk. El filme es una comedia de enredos en la que un viejo alfarero y su nieta llegan a Acapulco para crear una copia de una pieza arqueológica mexica y proteger la original. Con las actuaciones de “La india María”, Miguel Ángel Rodríguez, Carlos Riquelme, Armando Soto La Marina, Noé Murayama y Anabel Gutiérrez, entre otros. Su segunda película como realizadora es la cinta Ni Chana ni Juana/1984, historia de su autoría en la que interpreta un doble papel: una campesina vendedora ambulante y una famosa cantante española, acompañada de Armando Calvo, Carmen Montejo, Rubén “El Púas” Olivares y Leopoldo Salazar. Una producción también de Matouk.

Su tercer filme como directora es Ni de aquí ni de allá/1987, guion que escribe con sus dos únicos hijos, Ivette Lipkies e Iván Lipkies productor de la cinta bajo el sello de Producciones Vlady S.A., distribuida por Televicine. La trama: “La India María” emigra a los Estados Unidos donde su vida se convierte en una huída constante de las autoridades migratorias. María Elena Velasco plantea un juego de reafirmación de ciertos estereotipos alrededor de los problemas de los indocumentados en su inserción a las culturas urbanas estadounidenses, pero también de resistencia ante aquello que ha sido asumido como “la identidad de los migrantes”. “La India María” debe resolver problemas como el choque cultural en la frontera norte, su inserción en la vida cotidiana, el asedio de las autoridades migratorias, la supervivencia económica y cultural, desde un lugar marginal, lo cual da paso a situaciones contrarias a la legalidad y lo aceptado socialmente.

Continúa con Se equivocó la cigüeña/1992 (que también escribe), una comedia en que “La India María” se hace cargo de un recién nacido que después de secuestrado, es abandonado en su canasta. Ella es perseguida por unos hombres que quieren quedarse con el rescate del niño. Con Sebastián Ligarde, Malena Doria, Irma Dorantes, Claudio Brook, Ernesto Gómez Cruz y Aida Pierce, entre otros. Ivette Lipkies funge como productora ejecutiva y la cinta es distribuida por Televicine. El filme inaugura el servicio Cinestrenar de Cablevisión, el cual transmite la cinta una semana antes de su estreno comercial. Escribe, dirige, actúa y produce la revista musical “México canta y aguanta”, que alcanza 300 representaciones entre 1994 y 1996.

Escribe y protagoniza Las delicias del poder/1998, parodia política y social, dirigida por su hijo Iván Lipkies, a través de los personajes de unas gemelas que son separadas al nacer. La niña que es adoptada por un político, llega a ser candidata a la presidencia; en el proceso sufre un accidente que la deja inmovilizada, pero alguien le recuerda que tiene una gemela. Es así que la busca, la encuentra, y todo queda arreglado para que la sustituya en las próximas elecciones. Se aúnan al reparto: Ernesto Gómez Cruz, Irma Dorantes, Farnesio de Bernal, Adalberto Martínez “Resortes” y Héctor Ortega, entre muchos otros. La cinta se filma en el Estado de Morelos, Puebla y la Ciudad de México.

Bajo el título de Huapango/2002 y dirigida por Iván Lipkies, María Elena Velasco “La India María” adapta al cine la obra teatral de William Shakespeare “Otelo”, en la que lleva un papel secundario como maestra de baile. La historia, tragedia de envidia y celos retrata la vida en la Huasteca tamaulipeca a través de su folclor, tradiciones y costumbres, en el marco del festival de Huapangos, musicales y bailables típicos de la región, que se entretejen en una trama que forma parte de la nota roja de todos los días: el asesinato. Huapango, alegre y colorida producción, remite nostálgicamente a las películas de los años cincuenta, al baile tradicional, marimba, guitarra y al sabroso sonido del zapateado. En ella hacen su debut cinematográfico el actor Manuel Landeta y la cantante Lisset, al lado de Alejandro Tomassi. La película se estrena en la Cineteca Nacional en el marco del evento: Panorama del Cine Mexicano 2003 y llega a las salas comerciales con 60 copias en 2004. Con una gran aceptación ante la crítica obtiene el Premio Ariel a Mejor Adaptación (María Elena Velasco, Iván Lipkies, Ivette Lipkies) y cinco Diosas de Plata por: Mejor Película, Director, Actor (Alejandro Tomassi), Coactuación Masculina (Manuel Landeta) y La Revelación del Año (Lisset), en 2005.

Después de diez años alejada del cine, protagoniza y adapta La hija de Moctezuma/Iván Lipkies 2012, un guion escrito en 2008 por Ivette Lipkies, Iván Lipkies y Raúl Sánchez Figueroa. “La India María” a petición del espíritu de su bisabuelo Moctezuma Xocoyotzin, tiene que recuperar el espejo mágico de Tezcatlipoca (Dios Azteca), perdido en la montaña, en tiempos de la caída de Tenochtitlan, objeto también codiciado por la gobernadora, un arqueólogo español y un buscador de tesoros, a los que tendrá que enfrentar. Se aúnan al reparto: Eduardo Manzano, Rafael Inclán, Raquel Garza, Federico Villa e Irma Dorantes, entre otros. La cinta es financiada con recursos propios a través de su empresa productora: Vlady Realizadores y distribuida con 370 copias por Star Castle Distribution. La hija de Moctezuma se estrena el 9 de octubre de 2014.

María Elena Velasco fallece en 2015, dos semanas después de abandonar el hospital tras una operación de alto riesgo, a raíz de una enfermedad terminal.

¿Qué experiencia le deja desenvolverse en su faceta como directora de cine?

IM.- Básicamente, la experiencia de dirigir actores, de darles instrucciones, de motivarlos o de compartir la comedia, o simplemente deleitarme con un actor excelente que no necesite ser dirigido. He tenido miedo de la enorme responsabilidad de que buena parte del rodaje dependa del director, y me he dado cuenta de que hay que saber y estudiar mucho.

¿Qué opina del llamado “nuevo cine mexicano”?

IM.- Yo creo que la vida cambia a cada momento y el cine, para mí, es el reflejo de la época. El cine viejo alguna vez fue nuevo… el nuevo será alguna vez viejo. Actualmente en pantalla se ve lo que está pasando, sintiendo, viviendo en la realidad.

(Diccionario de Directores del Cine Mexicano, Isaura Rendón Pérez, 01/08/2000)