TOUSSAINT RITTER, CARLOS

Escenógrafo, director y argumentista. Se inicia como escenógrafo en Dos monjes/Juan Bustillo Oro 1934, trabajo que destaca por su lograda, propositiva y arriesgada atmósfera expresionista. Para el mismo director hace la escenografía de Monja, casada, virgen y mártir y El misterio del rostro pálido, ambas en 1935, Malditas sean las mujeres/1936, La tía de las muchachas/1938, En tiempos de don Porfirio/1939 y Ahí está el detalle/1940, entre otras.

Carlos Toussaint debuta como director con el cortometraje: Cantinflas y su prima/1940, asesorado por Juan Bustillo Oro. Dos años después codirige con Eva Limiñana “Duquesa Olga” el largometraje Mi Lupe y mi caballo/1942, comedia rural entre el género ranchero y el western, sobre la disputa entre un catrín (Ramón Vallarino) y un ranchero (Fernando Fernández) por los amores de “la Lupe” (María Luisa Zea). Producida por Eva Limiñana quien se encarga del argumento, mismo que adapta con Toussaint; la cinta logra concluirse tras un rodaje muy accidentado, se estrena tarde, en 1944 y sin éxito. En la Filmoteca de la UNAM se conserva una copia de la cinta, a la que desafortunadamente le falta la segunda mitad.

En su trabajo como escenógrafo que consta de 57 películas, destacan: El peñón de las Ánimas/Miguel Zacarías 1942, Santa/Norman Foster 1943, Nosotros los pobres/1947 y Ustedes los ricos/1948, de Ismael Rodríguez, Allá en el Rancho Grande/Fernando de Fuentes 1948 y La oveja negra y No desearás la mujer de tu hijo, díptico de Ismael Rodríguez en 1949.

Su segundo largometraje, aunque en realidad su debut en solitario, es el filme: De Tequila, su mezcal…/1949; bajo un argumento propio, comedia ranchera con tintes melodramáticos, en la que incluye dos documentales: uno sobre el tequila, que da inicio a la cinta, trama donde los dueños de dos fábricas de mezcal compiten de forma amistosa para crear el mejor producto, en el que se entreteje la historia de amor de Juan Ramón (Tito Guízar) y Linda (María Luisa Zea) y las infidelidades de él, que creyendo falsamente que su esposa lo ha engañado, en un arranque de celos le dispara, y milagrosamente la bala da sobre una medalla en su pecho. La cinta cierra con el segundo documental sobre las procesiones en honor a la Virgen de Zapopan. Se agregan al reparto: Bárbara Gil, Rafael Icardo, Manuel Noriega y Fanny Schiller, entre otros. Con locaciones en Tequilea y Zapopan, Jalisco y los estudios Azteca, y tiene un costo aproximado de 300 mil pesos.

Continúa con Marejada/1952, melodrama que sigue a un joven médico (Carlos Navarro) enviado a un pueblo costero, que se enfrenta a la desconfianza y prejuicios de los pobladores, quienes finalmente aceptarán su ayuda ante una epidemia. Película que gana el premio Ariel en 1953 por Mejor Música de fondo (Gustavo César Carrión), además de las nominaciones por Argumento Original (Juan M. Durán Casahonda) y Actuación infantil (Joaquín Roche Jr.).

Carlos Toussaint filma El crucifijo de piedra/1954, argumento y adaptación que coescribe con Paulino Masip, un melodrama rural en el que Marta (Rosa Elena Durgel), prostituta que se recupera de los maltratos de su padrote (Raúl Meraz) en un hospital, coincide con una joven que fallece en la cama de al lado. Cuando la abuela de ésta (Sara García) llega -obviamente tras años de estar alejadas- confunde a Marta con su nieta y la lleva con ella. Marta aprovecha la situación para cambiar de vida y vive con su ahora abuela. Raúl el hombre que la explotaba la encuentra. Finalmente, él es apresado, Marta es perdonada y feliz al lado de un hombre bueno (Fernando Casanova).

Carlos Toussaint se aleja de la dirección y retorna en 1958 con “El gaucho”, el cual queda inconcluso y cuyo material utiliza en Mi guitarra y mi caballo/1960, situada en el siglo XIX, trama donde un “jinete sin cabeza” apoyado por un charro justiciero busca hacer justicia ante el villano que tiene sometido a un pueblo. Ese mismo año dirige: Y Dios la llamó Tierra, adaptación de José Luis Celis y Carlos Toussaint del libro “Cuando Cárdenas nos dio la tierra” de Roberto Blanco Moheno. En tiempos del presidente Lázaro Cárdenas, un funcionario federal es enviado a Huilapan, Veracruz, para aplicar la reforma agraria, que no permite a nadie tener más de cien hectáreas. El representante del gobierno se enfrenta con la corrupción, viejas costumbres de los pobladores y un triángulo amoroso.

Entre 1961 y 1962, Carlos Toussaint realiza seis películas en las que aborda diversos géneros, como el musical en Baile de graduación/1961, con música de Johann Strauss, Raúl Lavista, y coreografía de David Lichine, quien también forma parte del elenco debido a sus dotes como bailarín. En efecto es la historia de un baile de graduación en una escuela de jovencitas al que asisten cadetes y un sueño mágico. El fusilamiento/1961, drama rural, en el que a través de un flashback, conocemos los motivos por los que un hombre está a punto de ser fusilado, aunque al final, su amada logra salvarlo. En 1962 dirige el cortometraje experimental en 16 mm El masoquista y la película El beso de ultratumba, su única realización en el género del terror, donde un experiodista, que dice estar escribiendo un gran libro (Sergio Jurado), casado por interés, se entera que su suegro ha muerto en la quiebra y aterroriza a su joven esposa (Ana Bertha Lepe) con toda la intención de asesinarla, para cobrar un seguro de vida de medio millón de pesos. Aunque indirectamente cumple su objetivo, muy pronto la alcanza en el más allá.

[Sobre El crucifijo de piedra] “La película abusa de crucifijos y canciones, y contiene la más curiosa observación que se le haya hecho a un cura en película alguna: ‘Si usted supiera lo que es ser amada por un hombre bueno…’ dice [Rosa Elena] Durgel a Domingo Soler con fondo de música de órgano”.

(Historia documental del cine mexicano, Emilio García Riera, Vol. 7, 1953-1954, p. 283)