VALDEZ SALAZAR, MITL CUAUHTÉMOC

Director, guionista, editor, productor ejecutivo y académico. Ingresa a la Escuela Nacional de Arquitectura de la UNAM en 1968, pero al terminar el segundo semestre, dada su determinante inclinación por el cine, decide abandonar la carrera; y en 1969, inicia los estudios de realización cinematográfica en el CUEC, del cual egresa en 1973. Como alumno del Centro, Mitl Valdez dirige los cortometrajes La burla/1970 y Al descubierto/1971; y colabora como asistente de dirección en los cortos Frida Kahlo/1973, dirigido por Marcela Fernández Violante y Ser/1973, dirigido por José Rovirosa, ambos producidos por el Departamento de Actividades Cinematográficas de la UNAM.

Por invitación del Dr. Manuel González Casanova, fundador del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC), de la Universidad Nacional Autónoma de México ahora Escuela Nacional de Artes Cinematográficas (ENAC), empieza a impartir las asignaturas de Guion de Ficción, Teorías de Eisenstein y Adaptación al Cine de Obras Literarias, asignaturas con las que continúa hasta ahora. En 1974 coescribe y codirige el documental Tícitl/1974 para el INPI. Asiste a Marcela Fernández Violante y Ser/1973, dirigido por José Rovirosa, ambos producidos por el Departamento de Actividades Cinematográficas de la UNAM. en el largometraje De todos modos Juan te llamas/1974, y a Federico Weingartshofer en Caminando pasos, caminando…/1975. En 1976 y 1977 edita los documentales Bahía de banderas, Comunidades indígenas, Fray Junípero Serra, y dirige el documental Canto de esperanza producido por el IPIC de Colima.

En 1982 es designado jefe del Departamento de Actividades Cinematográficas de la Dirección General de Difusión Cultural de la UNAM, cargo que desempeña hasta 1985. En 1983 gana el concurso del Programa de Superación del Personal Académico del CUEC y dirige el mediometraje de ficción Tras el horizonte/1984, adaptación del cuento “El hombre” de Juan Rulfo, cuya historia gira en torno al odio y a la violencia como conducta inherente, absurda, de la naturaleza humana; en el cual se propuso desarrollar un estilo fílmico vanguardista: alejarse de los estereotipos del cine mexicano y componer un relato no lineal, ubicando fuera del cuadro algunas acciones de los personajes y sus monólogos interiores. Protagonizado por: Noé Murayama, Rodrigo Puebla, Mario García González y Rodolfo de Alejandre; Tras el horizonte es nominado por la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC) al premio Ariel en la categoría de Mejor Mediometraje de Ficción 1984-1985; invitado al Festival de Arte de Cali, Colombia, 1988; y al Festival Cinematográfico Utopía Americana, Austria, 1992.

Su primer encuentro personal con Rulfo es casual. Mitl Valdez se lo encuentra en la librería El Ágora y le comenta que adaptó tres de sus cuentos para la producción de una película profesional universitaria. El escritor lo cita en su oficina del Instituto Nacional Indigenista para conocer los guiones, y le comenta que le gustan, que no tiene ninguna corrección que sugerir, ya que, no obstante que contienen varias modificaciones a los argumentos originales, expresan lo que él escribió. La última vez que acude a su oficina, su secretaria le informa que Juan Rulfo se encuentra delicado de salud, y le entrega la autorización escrita para filmar Tras el horizonte y Los Confines, que en 1987 se convertiría en su ópera prima.

Los Confines/1987, largometraje coproducido por el Departamento de Actividades Cinematográficas de la UNAM y Producciones Carlos Salgado, es la adaptación de dos cuentos de “El llano en llamas” de Juan Rulfo: “Diles que no me maten” y “Talpa”, articulados por tres fragmentos de un capítulo de “Pedro Páramo”, el encuentro en el inframundo de Juan Preciado con Donis y su mujer, los hermanos incestuosos, que funcionan en la película a manera de introducción, enlace y epílogo; en la cual se propone representar con un estilo poco convencional, muy personal, la cosmovisión del insigne escritor jalisciense sobre la compleja realidad rural mexicana de la primera mitad del siglo XX, así como su propia visión de la condición humana, a contracorriente del cine comercial que la trata de forma idealizada, artificiosa y grandilocuente. Desde que escribe el guion visualiza a los actores idóneos para representar a los personajes: Ernesto Gómez Cruz y Jorge Fegan como Juvencio Nava y don Guadalupe Terreros en “Diles que no me maten”; María Rojo, Manuel Ojeda y Ana Ofelia Murguía, respectivamente como la esposa, el hermano y la suegra, del Tanilo de “Talpa”, encarnado por Enrique Lucero; Pedro Damián y Patricia Reyes Spíndola como los hermanos incestuosos de “Pedro Páramo”; entre otros actores de un excelente reparto.

El estreno tiene lugar en el Centro Cultural Universitario, al que asisten Clara, esposa de Juan Rulfo, y su hijo, el joven Juan Carlos Rulfo, quien al final de la proyección le comenta entusiasmado a Mitl Valdez: “Ahí, en la película, está mi papá (poco antes había fallecido)”. Los Confines es nominado en 1987 a la Diosa de Plata otorgada por los Periodistas Cinematográficos de México (PECIME) en las categorías de: Ópera Prima, Adaptación Cinematográfica, Actuación Masculina; y nominado al Ariel por: Mejor Ópera Prima, Coactuación Femenina, Actriz de Cuadro, Ambientación. En 1988 es exhibido en la Tercera Semana de Cine Mexicano de Guadalajara y en el Octavo Foro de la Cineteca Nacional. Representa a México en: el XIV Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, España, 1988; el Festival de Cine Latinoamericano de La Habana, 1988; el Panorama de Cine Mexicano del Festival Cinematográfico de Moscú, 1990; la Retrospectiva del Cine Mexicano proyectada en el Centro Georges Pompidou, París, 1991; el Festival Cinematográfico Utopía Americana, Austria, 1992; y el Primer Encuentro Cinematográfico de Cancún, 1992, que distinguió a Ernesto Gómez Cruz con el “Jaguar de Jade” por Mejor Actuación Masculina. Los Confines es considerada por el historiador y analista cinematográfico Jorge Ayala Blanco, como la mejor adaptación de la obra de Rulfo al cine (“La disolvencia del cine mexicano: entre lo popular y lo exquisito”, editorial Grijalbo, 1991); considerada por la crítica especializada como la película número cuarenta de las cien mejores del cine mexicano (revista “Somos” No 100, 1994); la número veintiocho de las cincuenta inolvidables de la historia del cine nacional (Suplemento Cultural “Día Siete” del periódico El Universal, 2004); y para el historiador Douglas Weatherford, es una de las mejores adaptaciones cinematográficas de la obra de Rulfo (ARCADIA-Cátedra Ingmar Bergman, UNAM: “Filmar el vuelo literario, Juan Rulfo en el cine de Mitl Valdez”, 2021). A principios de 1989, Mitl Valdez es nombrado subdirector Académico del CUEC, responsabilidad que desempeña hasta 1996.

Su segundo largometraje Los vuelcos del corazón/1993, inspirado en el cuento “Resurrección sin vida” del escritor José Revueltas, es un melodrama social que revela las contradicciones de los activistas comunistas que lucharon por su causa en el México de los años cuarenta; una aguda crítica al dogmatismo que se extrapola a cualquier ideología política o tendencia religiosa. Los papeles estelares son representados por: Arturo Beristain, María Rojo, Dobrina Liubomírova y Martín Barraza; acompañados por: Luisa Huertas, Ernesto Gómez Cruz, Juan Carlos Colombo, Rosa María Bianchi e Ignacio Guadalupe. Además de contar con este gran reparto, Mitl Valdez compone el tema principal, los boleros y los danzones de la cinta.

La película es coproducida por: el Instituto Mexicano de Cinematografía (IMCINE), Producciones Carlos Salgado, la Dirección de Actividades Cinematográficas de la UNAM, el STIC y GECISA INTERNACIONAL. Es nominada al Ariel en las categorías de: Guion Cinematográfico, Actriz principal, Actor de Cuadro, tema musical escrito especialmente para el cine, Ambientación, Vestuario; nominada por PECIME a la Diosa de Plata en las categorías de: Mejor Película, Director, Mejor Actor. En 1994 se exhibe en: el Segundo Festival de Cine Paso del Norte y la Semana del Cine Mexicano del IMCINE. La cinta también es invitada a: la Sección Panorama del Festival Internacional Fílmico de Berlín, 1995; la X Muestra de Cine Mexicano de Guadalajara, 1997; y al IX Encuentro de Cine Latinoamericano de Toulouse, Francia, 1997.

Ese mismo año, Mitl Valdez es designado director del CUEC, donde ya impartía la asignatura de Guion de Ficción desde 1977. Durante su gestión impulsa nuevos e importantes programas para consolidar el sistema académico del Centro: la adquisición de equipo fílmico de tecnología digital, no lineal; el Programa Académico de Óperas Primas de Egresados del CUEC, financiado por la UNAM, IMCINE y FOPROCINE, con la finalidad de propiciar el debut profesional de los egresados del Centro en las distintas ramas del cine y los medios audiovisuales; de manera conjunta con Alfredo Joskowicz, a la sazón director del Centro, y el editor Rodolfo Peláez, funda la revista “Estudios Cinematográficos”, con los objetivos de difundir la cultura cinematográfica y propiciar la reflexión sobre el lenguaje audiovisual; es el iniciador de las gestiones para crear la Licenciatura en Cinematografía en la UNAM. En 1989 dirige, escribe y adapta, cuatro programas de la serie “Hora Marcada” producida por Televisa: “Reflejos fugaces”, “Humo rojo en las venas”, “Volar como pájaro”, “Una cuestión de honor”.

En el esquema de producción del Programa de Óperas Primas funge como productor ejecutivo de: Rito terminal/1999, primera ópera prima del CUEC, dirigida por Óscar Urrutia; Un mundo raro/Armando Casas 2001; y El mago/Jaime Aparicio 2003. Concluye su gestión administrativa como director del Centro en marzo de 2004; a partir de entonces, se dedica a las actividades académicas y a la realización de sus proyectos artísticos personales.

Entre 2005 y el 2007 escribe el guion y desarrolla el proyecto fílmico del largometraje “Visiones fugaces”; pero, ante el alto costo de su producción, lo replantea como un documental para mostrar la problemática de la ciudad de San Miguel de Allende, Guanajuato, cuyo paisaje urbano y costumbres de tradición histórica se han diluido y transformado negativamente, a raíz de la llegada de cientos de estadunidenses de la tercera edad que se convierten en residentes del lugar. 200 años después/2010-2012, aborda la paradójica actualidad del lugar, dos siglos después de que ahí se iniciara la Independencia de México.

El filme da inicio con las imágenes del festejo del Bicentenario en 2010, para enseguida mostrar la venta inmoderada de casas del centro histórico en la década de los noventa, la afectación del paisaje, y el consecuente desequilibrio ecológico y social de la ciudad y su entorno. Una coproducción de la UNAM y Verdeespina Studios filmada en formato digital, que se estrena el 8 de septiembre de 2011 en Cinemanía, la sala José Revueltas del Centro Cultural Universitario y en las salas del circuito de la Cineteca Nacional. También se exhibe en el Cinematógrafo del Chopo y la Casa del Lago; y durante el mes de octubre, se transmite por TV-UNAM.

En 2012 la UNAM le otorga el diploma y la medalla al Mérito Académico por 35 años de labores docentes; y en 2017, la Asociación Autónoma del Personal Académico (AAPAUNAM) lo distingue con el diploma y la medalla por 40 años de actividades. Mitl Valdez concluye en 2021 el ensayo “Tlillan Tlapallan” sobre la composición del guion “El vuelo de la Serpiente Emplumada”/2020 de su autoría, inspirado en la antigua saga náhuatl de Ce Ácatl Topiltzin-Quetzalcóatl, que planea producir y dirigir próximamente; ambos textos serán publicados por la Escuela Nacional de Artes Cinematográficas como materiales de apoyo a la enseñanza de la adaptación de obras literarias al cine. Actualmente participa en dos proyectos importantes de dicha Escuela: la creación de la Maestría en Guion de Ficción; y la Realidad Virtual Aplicada a la Educación de la Cinematografía.

MV.- “Le he dedicado gran parte de mi vida al CUEC (ENAC) porque estoy convencido de que tengo una responsabilidad social que cumplir: coadyuvar a que existan mejores circunstancias académicas para la formación de los nuevos cineastas; retribuir al propio Centro y a la Universidad Nacional, todo lo que me han dado para formarme y desarrollarme como realizador; así como aportar mi esfuerzo para el resurgimiento de la industria cinematográfica nacional.

Considero que el universo del cine no se reduce al prestigio que uno pueda forjarse como director, ni al glamour ni a la feria de vanidades propias del medio del espectáculo. El cine es mucho más que eso, también es una expresión artística seria que se apoya necesariamente en la docencia, la investigación y la difusión. En este sentido, es cierto que el CUEC ha frenado mi productividad como guionista y realizador, pero también me ha permitido superar el status de cineasta funcional y desarrollarme en el plano de la reflexión teórica. Ha sido difícil conciliar la creación fílmica y la docencia, sin embargo, ello es posible, y pronto dirigiré mi tercer largometraje.”

Mitl Valdez