BAQUERIZA, GUILLERMO

Director de fotografía. Después de ser operador de cámara para la empresa alemana Tobis, se inicia como fotógrafo de cine en Sobre las olas/Miguel Zacarías 1932, a la que siguen, en la misma función de director de fotografía, La Llorona/Ramón Peón 1933 –en la que se emplea por primera vez una grúa fabricada por él mismo–, y Bohemios/Rafael E. Portas 1934; a mediados de este año, concluye la fotografía de tres cortos turísticos dirigidos por Max Urban: Taxco, Viernes de Dolores y Pachuca. En 1935 es director de fotografía y coadaptador de Madre querida/Juan Orol, cuyo modelo dramático copia para filmar en 1935 su única película como realizador: Los desheredados, en la que es fotógrafo y adaptador, bajo un argumento de Consuelo Oliva, drama social en que un niño huérfano de padre, es encarcelado por un asesinato que no cometió. La historia se inicia en 1910 y termina en 1912, para mostrar las mejoras penales a raíz del triunfo de la Revolución. Llevan los papeles protagónicos, el niño Antonio Liceaga, mismo actor de Madre querida, y Lucha María Bautista. Desafortunadamente Guillermo Baqueriza fallece en plena filmación, y su asistente, Carlos L. Cabello, y Mario de Lara, su asesor, concluyen la filmación y Juan Bustillo Oro se encarga de la edición.

“… Probablemente un afán de originalidad o de reserva había distraído a Baqueriza. En caótica alternancia narraba episodios de la juventud de sus protagonistas y los de su niñez, en saltos constantes de una a otra edad, sin orden alguno y sin propósito aparente. Simplemente dividí de nuevo las escenas y rehice la edición, colocando las secuencias en encadenamiento cronológico. Y reinserté en el lugar que le correspondía, con este criterio, muchas escenas que parecían no tener relación con el asunto. No me remordió la conciencia porque no alcancé a ver qué intención artística de Baqueriza estaba yo vulnerando. La consecuencia fue una cinta inteligible, popular y llena de emoción.”

(Vida cinematográfica, Juan Bustillo Oro, pp. 148)