URRIOLA PARDO, EDUARDO

Actor, productor y director. Hijo de un prominente terrateniente, desde muy joven estudia en Estados Unidos, donde se gradúa como Ingeniero Agrícola. De espíritu inquieto y rebelde, abandona su hogar y vive una agitada juventud llena de aventuras. Trabaja como aprendiz de diamantista bajo la tutela de Evaristo Acosta. Se incorpora a la Escuela Militar de Aspirantes, de donde egresa como subteniente de infantería; en servicio, asciende a capitán, pero al inicio de la Revolución Mexicana de 1910 se refugia en Estados Unidos. Posteriormente se une al Ejército Constitucionalista. Después de la derrota del usurpador Victoriano Huerta, es nombrado comandante de la policía capitalina.

Abandona la carrera militar para trabajar como representante de su hermana, la popular tiple Rutila Urriola. A través de ella y de manera incidental, debuta como actor de las cintas producidas por la Secretaría de Guerra y Marina entre 1919 y 1920: Juan Soldado/Enrique Castilla y El precio de la gloria/Fernando Orozco y Berra de 1919; y El blockhouse de alta luz/Fernando Orozco y Berra 1920. Después de actuar en El escándalo/Alfredo B. Cuéllar 1920, coproduce, coescribe e interpreta Fanny o el robo de veinte millones/Manuel Sánchez Valtierra 1922, y coproduce e interpreta El señor alcalde/Enrique Castilla 1922.

Fascinado y seguramente influido por las vampiresas norteamericanas, Eduardo Urriola elige en sus historias a personajes de mujeres peligrosas y aventureras. En 1925 funda con Manuel Arvide la escuela-empresa Artistas Unidos Mexicanos, para la cual dirige, produce y escribe: La banda del cinco de oros/1926, cinta de aventuras policiacas, en la que el personaje principal es una mujer de extraordinaria hermosura y talento diabólico que se burla de la justicia. En Del rancho a la capital/1926, Eduardo Urriola hace una comedia a costillas de los rancheros; un cartel publicitario incita: “¡A reír! !A gozar! A deleitarse con la ingenuidad de dos provincianos que por primera vez visitan la gran ciudad y caen en manos de dos peloncitas que los dejan como al gallo de Morones (sin pluma y cacareando)”. Al siguiente año produce, escribe y dirige su última obra, la película de aventuras Una catástrofe en el mar/1927. Se retira del cine con la llegada del cine sonoro.

“En los momentos que esto escribo, tengo ante mis ojos la copia de un folleto que escribió [Urriola] para dar a conocer al público el objeto de la organización [Artistas Unidos Mexicanos], así como las condiciones para ingresar a ella y el plan de estudios para los aspirantes a las glorias fílmicas.”

“Eduardo Urriola se constituyó director de la agrupación, y Manuel Arvide –otro elemento de gran valía que aún sigue cosechando merecidos triunfos en el cine–, fue designado gerente.”

“El centro docente de Artistas Unidos Mexicanos no se contentó con difundir conocimientos de los técnicos del llamado séptimo arte, para entrenar a los artistas y abrirles los caminos de la industria, sino que se propuso facilitar a sus discípulos la oportunidad de poner en práctica sus adelantos. Así surgió la productora Artistas Unidos Mexicanos, de la que fue nombrado presidente el señor Hugo Paglieri, que se lanzó a la producción de una película de tema policiaco [La banda del cinco de oros].”

(Cinema Reporter, “Historia del cine mexicano, Capítulo XIX, Eduardo Urriola. Actividad Incansable”, José María Sánchez García, 01/09/1954, en Archivo de Esperanza Vázquez Bernal y Federico Dávalos Orozco)