REYNOSO FLORES, DAVID

Actor y director. A los once años es becerrista y a los 17 novillero profesional. Trabaja como chofer de taxi en Monterrey, obrero en troncales, esmaltes y tubos de acero, agente viajero de una vitivinícola y jefe de publicidad de una compañía embotelladora de refrescos en Aguascalientes; al retirarse del toreo ingresa a la estación de radio XEYZ de Aguascalientes donde se desempeña como locutor. Colabora en las radiodifusoras XEKX de Guanajuato y en la XEDN de la Comarca Lagunera.

Llega a la Ciudad de México y se integra como extra en el reparto de Al diablo las mujeres/Miguel M. Delgado 1954. Obtiene su primer papel secundario en Aquí está Heraclio Bernal/Roberto Gavaldón 1957. Actúa en más de 200 filmes entre los que destacan Ánimas Trujano/1961, Los hermanos Del Hierro/1961, ambas de Ismael Rodríguez, y Viento negro/Servando González 1964. Es delegado de actores de la ANDA en Aguascalientes durante 1956. En 1958 debuta en teatro con la obra “Una amante en la ciudad”.

Dirige el filme Caminos de Michoacán/1977, protagonizada por Yolanda del Río, Gerardo Reyes, Freddy Fernández “El Pichi” y el mismo David Reynoso. Es secretario general de la ANDA en dos periodos: de 1978 a 1982 y de 1982 a 1986. El 29 de marzo de 1992 recibe la medalla Virginia Fábregas por 25 años de carrera artística ininterrumpida.

“A unos cuantos meses de lo que te estoy diciendo –continúa David–, me encontraba yo frente a don Roberto Gavaldón. Me dio a leer dos guiones para la serie Aquí está Heraclio Bernal. Pero yo nunca había visto un guion y no entendía nada de las anotaciones que llevaba en cuanto a colocación de cámara y todas esas cosas. Era algo así como llegar de repente a Marte, encontrarlo habitado y oír hablar una lengua que no entiendes ni por equivocación. Cuando estaba yo dispuesto a abandonar todo aquello, conocí a Antonio Aguilar y comenzó a darme papeles en sus películas. Unos eran importantes, otros no; pero había entrado ya en el cine y tú sabes que el cine es como algo mágico, produce una especie de hechizo del que difícilmente te liberas.”

(El Día, “David Reynoso quiso ser torero, fue locutor y ahora es actor de cine”, 13/02/1972, en Archivo de Esperanza Vázquez Bernal y Federico Dávalos Orozco)