MAICON, BORIS

Director. De origen ruso Boris Maicon inicia sus trabajos como cineasta en la Empire Productions propiedad de Maurice A. Chase en New York, a fines de los años veinte. En dicha empresa se realizan los cortos sonoros conocidos como los Empire Talkies. A Maicon se le encarga la dirección de un corto sonoro titulado The Wishbone/1929. Viaja a México y en 1933, con el ingeniero Efraín R. Gómez planean la construcción de unos estudios que tienen por objetivo realizar películas sonoras. Los estudios cinematográficos llevan el nombre de Monte Albán, S. A. y están ubicados en la ciudad de Cuernavaca, Morelos; además el proyecto incluía casas para los trabajadores cinematográficos. En dicho lugar, el director ruso intenta realizar la cinta “El expreso nocturno” con las actuaciones de Roberto Gavaldón, Mario Tenorio y fotografía de Ross Fisher, pero no llega a filmarse. Cabe mencionar que ninguna de las películas realizadas por el director fueron filmadas en dichos estudios, por lo que su construcción sólo fue un pretexto para construir un fraccionamiento.

Su primer largometraje es La isla maldita/1934, película de aventuras con guion de Alejandro Galindo y sonido de los hermanos Roberto y Joselito Rodríguez sobre unos presos que escapan de la cárcel y llegan a una isla donde encuentran el tesoro de unos frailes peruanos del siglo XVIII. En 1936 forma parte de la Unión de Directores Cinematográficos de México y realiza el cortometraje Novillero, primera cinta mexicana a colores realizada con el proceso Cinecolor. El filme de tres rollos, dura 30 minutos aproximadamente y es producida por el diputado sonorense Roberto A. Morales. Se filma en los estudios México Films con actuaciones del torero Lorenzo Garza, el cantautor Agustín Lara, Manolo Noriega y Lucha María Bautista, se estrena en octubre de 1936. En una nota escrita por el periodista Gabriel Navarro informa que Morales intentó vender el corto a unos directivos de Hollywood, ellos establecen una condición indispensable para su distribución: eliminar las escenas de la corrida de toros donde se martiriza al pobre animal, pues la Sociedad Protectora de Animales es muy severa en los Estados Unidos. Bajo esas condiciones, el productor mexicano no la vende y se regresa a México para distribuirla él mismo y no alterar el corto taurino.

Es supervisor del cortometraje musical Alegría mexicana/Carlos Véjar 1936. Su segundo largometraje es Ojos tapatíos/1937, que resulta ser una de tantas comedias rancheras que abundan en la cinematografía mexicana aprovechando la fama de Allá en el rancho grande al llevar en el reparto a Esther Fernández y Emma Roldán. Continúa con Infidelidad/1938, su último largometraje: Un hombre casado (Miguel Ángel Ferriz) abandona a su mujer (Magda Haller) y a sus hijos por una mesera (Ana María Robles Puig). A partir de su infidelidad le suceden varias desgracias.

En una nota publicada en la revista “Cine Mundial” firmada por el periodista Pepe Elizondo y fechada en marzo de 1941, informa que Boris Maicon acaba de filmar un corto a colores con la torera peruana Conchita Cintrón, muy popular entre el público taurino. Desafortunadamente no hay más información sobre este corto ni se da el título del mismo.

[Sobre Novillero] “… contuvo vistas documentales con una faena de su protagonista, el diestro regiomontano Lorenzo Garza, según Harry T. Smith (04/03/39): ‘El título es bastante engañoso, ya que la práctica del Sr. Garza en el rancho de Manolo Noriega con novillos es solamente un breve preámbulo de la gran escena en una verdadera plaza de toros’ (la faena de Garza fue al parecer la muy célebre que hizo al toro Benito, indultado por bravo y noble, pero me parece extraño que esa parte haya sido en colores).”

(Historia documental del cine mexicano, Emilio García Riera, Vol. 1, 1929-1937, p. 250)