CARRASCO AGUAYO, JUAN CARLOS

Director y fotógrafo. Juan Carlos Carrasco estudia Cine en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos CUEC-UNAM ahora ENAC (1993-1998), en donde dirige los cortometrajes en 16mm, Yo así no juego/1994 y Karatv/1995. Se inicia como fotógrafo en Clandestinos/Fernando Reyes 1996 y Sobre la tela de una araña/Andrea Borbolla 1996. En 1997 escribe, produce y dirige el documental José Barrientos, sobre un joven discapacitado y sus esfuerzos por sobresalir en las justas deportivas. Por este trabajo Juan Carlos Carrasco recibe el Ariel a Mejor Cortometraje Documental 1998. Su tesis es el cortometraje filmado en 35mm Ciudad que se escapa/Rodrio García Záis 1998, del cual es fotógrafo, en donde lo asiste Aram Díaz, quien años más tarde colabora como fotógrafo en dos de sus películas.

Es director de fotografía de segunda unidad en la cinta La paloma de Marsella/Carlos García Agraz 1998. Dirige comerciales para Yoplait, Likra y Telcel. Continúa con la dirección del corto Quien te quiera que te aguante. Es fundador y director de Tres Piedras Producciones, empresa que crea en 1998 y con la que produce sus trabajos cinematográficos.

Su ópera prima, Santos peregrinos/2004, es un argumento que surge a partir de recuerdos de juventud y vivencias personales relacionadas con los vecinos de la colonia, personajes que inspiran a Juan Carlos Carrasco para desarrollar el guion, que escribe en mancuerna con José Antonio Carreón. Es así que surge una comedia urbana de humor negro, que el director define como “Una vecindad, un objeto del deseo, que se maten entre ellos”, historia que se filma en un viejo edificio del Centro Histórico. En la trama don Emiliano, supuesto hijo del general Emiliano Zapata, organiza una posada con los habitantes de una humilde vecindad, llevando sus figurillas de José, María y Jesús y los Santos Peregrinos que le heredó su padre. Unos días antes de la festividad don Emiliano muere y hereda los Santos Peregrinos a sus vecinos, quienes deciden seguir adelante con los planes; sin embargo, un accidente revela un gran secreto en torno a las figuras, lo que hace que se despierten antiguas rivalidades y oscuros y codiciosos deseos entre los habitantes de la vecindad. La cinta cuenta con las actuaciones de Carmen Salinas, Adal Ramones, Isaura Espinoza, Arturo Beristain, Paloma Woolrich y Julieta Egurrola, entre muchos otros. Tiene un costo de 400 mil dólares, es distribuida por DECINE con 192 copias, y se mantiene siete semanas en cartelera en la Ciudad de México y 25 semanas en provincia. En taquilla se recaudan 14 millones de pesos y otros siete en la venta del DVD. Santos peregrinos es nominada al Ariel (2005) en las categorías de Mejor Ópera Prima y Mejor Actriz de Cuadro para Paloma Woolrich; además de ganar la Diosa de Plata a Mejor Revelación Masculina para Adal Ramones.

Es director de fotografía de la serie televisiva “¿Y Ahora Qué Hago?”/2007, estelarizada por Adal Ramones. Dirige infomerciales y el programa de revista “Vive la vie” para el canal de televisión de paga: E! Entertainment.

Juan Carlos Carrasco realiza Martín al amanecer/2010, cinta en la que vuelve a colaborar con Adal Ramones y Carmen Salinas, acerca de un hombre solitario que viaja por el desierto con las cenizas de su madre hasta que se descompone su coche. Obligado a caminar y buscar ayuda, llega a una casa de citas atendida por una mujer madura; ahí conoce a una joven muda que lo motiva a cambiar su vida. Completan el elenco: Imelda Castro, Manuel Ojeda, Rafael Amaro y Diana Bracho, entre otros. La cinta, a diferencia de su trabajo anterior, tiene un enfoque más íntimo e introspectivo. Se estrena durante el Festival Internacional de Cine de Guadalajara, México, en 2010; además de presentarse en otros Festivales de Cine de: Puebla, Acapulco y San Diego, California. Llega a los cines el 25 de agosto de 2013.

Continúa con el documental De arriba para abajo/2014, que aborda la gira del actor Adal Ramones “Monólogos”, recorrido a través de siete países, producido y actuado por el propio comediante.

Su tercer largometraje ficción es El amor no puede esperar/2019, original comedia romántica donde dos personas amantes del cine unen sus destinos al quedar atrapados por accidente una noche en un videocentro de la Ciudad de México. La actriz es Mónica Huarte, encargada del videoclub y Adal Ramones es el cliente. Historia en la que el destello del amor llega a los dos personajes cuando menos se lo esperan, afines en su soledad y en la pasión por el séptimo arte, gusto que emerge con naturalidad en los diálogos. Todo un tour de force histriónico de ambos actores siempre en pantalla durante los 74 minutos que dura la película, filmada en una sola toma sin cortes (plano secuencia), sensacional trabajo del director y del fotógrafo Aram Díaz, sobre todo en un espacio reducido y alargado como es el del Video Club Amores, de la colonia Del Valle, en la Ciudad de México, uno de los últimos sobrevivientes de este giro, donde se lleva a cabo el rodaje. El amor no puede esperar gana en la categoría de Mejor Película en el Festival Internacional de Cine de Tequila, México, en 2020. La cinta es adquirida por HBO Latin en Cannes, para su distribución en Latinoamérica, mientras que en Taiwán se vende en DVD. A pesar de tener funciones para distribuidores en México, no ha conseguido exhibirse comercialmente en cines mexicanos, quedando rezagada debido a su duración.

Los actores de extracción televisiva, como Adal Ramones, ¿funcionan en el cine, son un gancho para el público, o no tiene que ver esto?

JCC.- Nosotros hicimos la selección de los actores. En el proceso me preguntaba qué actor quedaba en el perfil de los personajes, y Adal Ramones fue el primero en el que pensé. Nos pusimos en contacto, vino a hacer el casting y se quedó con el papel. Así pasó con la mayoría de los actores. Con Carmen Salinas igual, platicamos con ella, vi que sí funcionaba para el papel y se lo quedó. En cintas de poco presupuesto como ésta a los actores les tienes que ofrecer una historia que los convenza y no un gran cheque.

Para Martín al amanecer también trabajo con actores reconocidos y es un proceso de convencimiento, en que yo creo que son los mejores actores para mi personaje, y que son los ideales para hacerlo, que les guste la película, y quieran participar, me gusta más tener cómplices. Si se tratara de hacer todo gancho de televisión, no hubiera tenido a Julieta Egurrola ni a Arturo Beristain, a lo mejor no hubiera tenido a Jimena Guerra o a Moisés Iván.

Yo siempre traté de ser muy honesto con lo que quería, si hubiera buscado gente de Televisa y telenovela, se notaría en la película, y no es así, hay gente de todos los extractos. Hay gente de mucho cine como Carmen Salinas y hay gente de mucho teatro como Julieta Egurrola; está mezclado, por ahí no me pueden achacar que usé pura gente de televisión y famosos, usé uno, sí, porque era el ideal para el personaje.

(Diccionario de Directores del Cine Mexicano, Mónica García Ramírez, 10/12/2007)

Sobre El amor no puede esperar:

JCC.- “La idea era filmar la película en 4 o 5 semanas, pero me incliné en hacerla en un plano secuencia de poco más de una hora; un día me di cuenta, terminando uno de los últimos tratamientos del guion, que podía compactar la historia, modificarla un poco y hacerla en un plano secuencia. Eso me dio mucha tranquilidad financiera y la libertad de hacerla de una vez por todas y no dejarla en el tintero, como algunos otros proyectos que no he podido levantar por presupuesto. Adal y Mónica estuvieron muy comprometidos con el proyecto, ensayamos mucho al lado de Aram Díaz, el director de fotografía y juntos resolvimos la película en 74 minutos. La verdad quedamos muy contentos con el resultado”.