Pionera del cine mexicano, directora documentalista, responsable del primer Departamento de Censura y de Cinematografía creados por el presidente Venustiano Carranza y promotora en México de los equipos de filmación y proyección de “Nicolas Power Company”.
Aún niña, al morir su padre, se muda con su madre y Dolores su hermana, a vivir con otra familia en el mismo puerto de Veracruz, y su madre las sostiene trabajando como partera. Adriana y su hermana se ven obligadas a dejar la escuela y comienzan a laborar en un estudio fotográfico. Una vez que obtienen los conocimientos suficientes del negocio, deciden abrir el suyo y en el patio de la casa que habitan, lo montan; se especializan en tomar retratos. El estilo artístico de las hermanas gusta a los clientes por lo que su negocio adquiere prestigio.
Proveniente de una familia anti porfirista y simpatizante con Madero y Carranza, atestigua la llegada de Venustiano Carranza al Puerto de Veracruz en 1915, pues se declara en rebelión por no haber sido reconocido presidente de México en la Convención de Aguascalientes. Las hermanas son llamadas para retratarlo, el resultado es de su agrado.
Gracias a una beca que promueve Carranza, el 4 de septiembre de 1916 llegan a bordo del barco Monterrey a la Isla de Ellis en Nueva York y se trasladan a Boston, Massachusetts, donde durante tres años se perfeccionan en Fotografía en los estudios Champlain y por las noches asisten a una escuela de arte para maestros. El gobierno mexicano les extiende la beca para estudiar Cinematografía en el Army Medical Museum en Washington, donde el gobierno norteamericano asigna fondos para producir filmes que eduquen e informen sobre temas de salud, a los soldados que pelean en la Primera Guerra Mundial.
Con una disciplina militar, las hermanas Adriana y Dolores aprenden a filmar, procesar las películas en laboratorio y realizar los títulos e intertítulos de éstas. Terminan su preparación de Producción Cinematográfica en los Estudios de Universal Pictures Company, en Jacksonville, New Jersey, en los que practican los conocimientos cinematográficos.
A su regreso en 1919 se establecen en la Ciudad de México y obtienen la concesión para vender cámaras y proyectores de la marca estadounidense Nicholas Power Company. Establecen la tienda en el primer piso de su casa que será conocido como “Casa Ehlers”.
Hacia el mes enero de 1920, el gobierno del presidente Carranza crea el Departamento de Cinematografía a cargo de Dolores Ehlers en el cual se realizan películas propagandísticas y el Departamento de Censura, dependiente de la Secretaría de Gobernación, del que hace responsable a Adriana Ehlers, con el objeto de cortar en las películas las escenas que denigren a los mexicanos, tan frecuentes en las producciones estadounidenses y las que lastimen la moral pública. Debido a las protestas de alquiladores y distribuidores, este organismo desaparece en septiembre del mismo año, durante el gobierno provisional de Adolfo de la Huerta, y al asumir la presidencia el General Alvaro Obregón, se reinstaura.
Las hermanas se dedican a viajar por toda la República llevando sus pesadas cámaras Bell and Howell y la Universal, procesando sus filmes en el laboratorio cinematográfico del gobierno. En 1920 filman La industria del petróleo sobre la industria petrolera, para ser presentado en una exposición montada en Dallas, Texas, que no gusta al secretario de Industria y Comercio y suspende su proyección. Al año siguiente realizan tres películas: sobre las pirámides de Teotihuacán, el Museo de Arqueología, Historia y Etnografía, situado en las calles de Moneda, y, por encargo de Ramón Pereda para la Cervecería Modelo, filman un partido de futbol entre el Real España de México y el Real Madrid de España.
Sus documentales son exhibidos en escuelas, fábricas, departamentos gubernamentales e instituciones dedicadas a la caridad. Es probable que sean las realizadoras de otros documentales producidos por la Secretaría de Gobernación, como El agua potable en la Ciudad de México/1920.
En 1923, la actriz Elena Sánchez Valenzuela las sucede en el Departamento de Censura. Entre 1922 y 1929 producen los noticieros semanales Revista Ehlers en los que filman actualidades como inundaciones, desfiles y acontecimientos de interés nacional. Material que venden a los exhibidores y que suspenden con el advenimiento del cine sonoro por carecer del equipo necesario. Concluyen su carrera cinematográfica. Adriana Ehlers se casa en 1927 con Roberto Rocha, también cinematografista; la cineasta muere en 1972 debido a un problema de úlceras gástricas y es enterrada en el Panteón Francés de Río San Joaquín, en la Ciudad de México.
Los materiales filmados por Adriana y Dolores Ehlers, pasan del resguardo de la Secretaría de Gobernación, al Archivo Nacional y de ahí a la Cineteca Nacional, donde lo más seguro es que se quemaron en el incendio de 1982.
“En amena plática, que con las dos jóvenes tuvimos ayer, nos expresaron que durante su estancia en el país vecino, y por cuantos medios tuvieron a su alcance, laboraron por hacer que los norteamericanos comprendieran cuán erróneamente juzgaban a México, y que consiguieron hacer una labor de estrechamiento cultural, que juzgan, será de benéficos resultados. Nos expresaron que al volver a la patria no tienen más deseos que contribuir en su esfera al engrandecimiento nacional, y que para conseguirlo, tienen la representación de la Educational Bureau Commercial Economics, que radica en los Estados Unidos, y que tiene ramificaciones en China, Japón, Europa, Australia, Centro y Sudamérica, y ahora en México. En la gira que las señoritas Ehlers harán por la República, filmarán películas nacionales que mandarán al Educational Bureau, a fin de que sean exhibidas en otros países.”
(Excélsior, “Sritas. Adriana y Dolores Ehler [sic] que se perfeccionaron en Estados Unidos en el arte cinematográfico, y que por medio de películas harán conocer a México en el país del norte”, 04/05/1919, p. 8, en Archivo de Esperanza Vázquez Bernal y Federico Dávalos Orozco)
Poco es el cine que realiza con su hermana, atrapadas en la más densa burocracia y menos productiva aún, es su cruzada por impedir la exportación e importación de imágenes miserables y denigrantes de México. Según la prensa, las hermanas Dolores y Adriana Ehlers, responsables del Departamento de Censura de la Secretaría de Gobernación, son poco amables con las personas que tratan.
Al estallar la rebelión de Agua Prieta y la consiguiente salida del presidente Carranza, las hermanas Ehlers dejan de presentarse en las oficinas para regresar días más tarde, citando a diferentes personalidades del ambiente cinematográfico. Son consideradas responsables de la aprehensión de varios exhibidores el domingo 4 de mayo de 1920, que se reúnen para analizar la situación. Se afirma que por iniciativa de ellas, el gobierno establece los Laboratorios Cinematográficos y el Departamento de Censura Fílmica.
El Reglamento de Censura Cinematográfica del 1 de octubre de 1919 y su respectivo Reglamento Interior, del 2 de octubre de 1919, establece, al igual que el reglamento huertista posterior, la censura previa del material filmado que se exporte y del que se exhiba en México, y contempla la creación de un Departamento de Censura dependiente de la Secretaría de Gobernación, que desde entonces –y con las naturales adecuaciones– persiste hasta la actualidad.
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